- ¿Cuándo? La erica gracilis se puede sembrar a inicios de la primavera o a finales del verano y se propaga a partir de esquejes de brotes laterales de la misma planta.
- ¿Dónde? La variedad gracilis de la erica se puede sembrar en cualquier tipo de suelo, pero que tenga buen drenaje. También puede prosperar en suelos calcáreos, arenosos o pobres.
- ¿Cómo regamos? El riego para la erica gracilis debe ser abundante al momento de la siembra y esperar a que se seque el sustrato para volver a regar.
- ¿Cada cuánto regamos? Durante el invierno, en caso de no recibir el agua directa de la lluvia, es mejor regar solo una vez a la semana mientras que en verano se recomiendan hasta dos riegos a la semana, dependiendo del calor de la zona del cultivo.
- ¿Qué cuidados requiere? Los cuidados de la erica gracilis son muy sencillos, pero se recomienda estar muy atentos con el exceso de humedad del sustrato porque puede ocasionar enfermedades por hongos a la planta.
- ¿Qué plagas y enfermedades le afectan? La erica gracilis es una planta resistente a las plagas, pero se puede ver perjudicada por el exceso de riego y un mal drenaje del sustrato que pueden ocasionar pudrición de la raíz y enfermedades por hongos.
¿Qué características tiene la planta erica gracilis?
Pertenece a la familia de las Ericáceas cuyo origen se sitúa en Suráfrica y es conocida como Brezo de Rosa y Erica Rosa. La erica gracilis es una planta arbustiva apreciada por su belleza y el colorido de sus flores.
Es una especie que puede llegar a medir 1 metro de altura cultivada en exteriores y jardines, pero en macetas no pasa de los 40 cm de alto.
Tiene hojas muy pequeñas, lineares, con formas de agujas delgadas y puntiagudas, perennes y de un color verde muy oscuro. Es un género de rápido crecimiento, muy resistente al fuego.
Las flores de la erica gracilis crecen hacia abajo tiene forma de campana globosa y son muy pequeñas. Sus floraciones son otoñales y se mantienen durante el invierno, crecen agrupadas en los extremos de los tallos y se caracterizan por ser de color rosado, crema o blanco.
La erica gracilis se ha convertido en una de las plantas preferidas para adornar las casas y jardines durante la navidad.
¿Cuándo sembrar la erica gracilis?
¿Dónde plantar la erica gracilis?
¿Cómo regamos la erica gracilis?
El riego para la erica gracilis debe ser abundante al momento de la siembra y esperar a que se seque el sustrato para volver a regar.
Es una planta resistente a la sequía por lo que se recomiendan riegos moderados para mantener cierta humedad en el sustrato, sin encharcar la planta.
La erica gracilis prefiere el agua ácida (la lluvia es la mejor) por lo que se recomienda acidificar el agua de riego con unas gotas de vinagre o zumo de limón.
¿Cada cuánto regamos la erica gracilis?
¿Cómo sembrar una erica gracilis paso a paso?
Los expertos señalan que la mejor forma de propagar a la erica gracilis es mediante esquejes de brotes laterales de la planta:
- Seleccionar un brote de una rama lateral de la erica gracilis que esté en buenas condiciones fitosanitarias.
- Recortar el esqueje de más o menos 5 cm de largo.
- Elegir una maceta profunda.
- Rellenar con un sustrato universal húmedo mezclado con un poco de arena fina para garantizar un buen drenaje.
- Regar de forma abundante para mantener el sustrato húmedo sin encharcar.
- Ubicar el cultivo en un lugar sombrío y a una temperatura de 18 a 25º C, hasta que salgan los nuevos brotes.
- Mantener la temperatura colocando bolsas plásticas cubriendo el cultivo, y destapando unas horas al día para renovar el aire y evitar hongos.
- Trasplantar a una maceta o directamente al jardín cuando las plántulas alcancen 7 cm.
- Usar un compost a base de turba y un puñado de arena fina lavada para que drene bien.
¿Qué cuidados necesita la erica gracilis?
Los cuidados de la erica gracilis son muy sencillos, pero se recomienda estar muy atentos con el exceso de humedad del sustrato porque puede ocasionar enfermedades por hongos a la planta.
Es una especie que se puede sembrar en cualquier tipo de suelo ya sean pobres en nutrientes, arenosos o calcáreos.
Prefieren los sustratos sueltos y porosos o con una buena proporción de turba añadida. Le gustan las temperaturas frescas de la primavera y el verano, pero no soporta el exceso de calor ni fríos extremos.
Necesitan una humedad elevada, pero no exceso de agua, por lo que se recomienda mantener el sustrato húmedo y rociar sus hojas de vez en cuando. La falta de agua en el sustrato de la erica gracilis puede producir una caída grave de sus hojas y un exceso de humedad pudrirá sus raíces.
La erica gracilis se desarrolla muy bien a pleno sol, con luz brillante y con aire fresco, aunque no es muy exigente en cuanto a la ubicación. No requiere de muchos abonos y en caso de colocarlo se recomienda el uso de pequeñas dosis de fertilizantes líquidos para plantas ácidas en el agua de riego.
Necesita una poda anual para mantenerse compacta, por lo que se recomienda retirar las flores secas, después de la floración y recortar el extremo de los tallos al final de febrero o principios de la primavera.
¿Qué plagas y enfermedades afectan a la erica gracilis?
La erica gracilis es una planta resistente a las plagas, pero se puede ver perjudicada por el exceso de riego y un mal drenaje del sustrato que pueden ocasionar pudrición de la raíz y enfermedades por hongos.
En el caso de que las hojas de la erica gracilis comiencen a secarse o a caerse es probable que haya permanecido mucho tiempo seca, por lo que es necesario regar.
Si las raíces están podridas se recomienda sacar la planta completa desde la raíz y verificar su estado. Cuando las raíces se vean marrones se recomienda dejar secar la planta, cambiarla de recipiente y luego regar para mantener la humedad.
Algunos jardineros expertos señalan que se debe estar muy atentos con la aparición de la cochinilla, los ácaros y las arañas rojas en la planta de erica gracilis. Para atacar la aparición de estos insectos se recomienda la aplicación de alcohol al 96% con un pincel.
En el caso de encontrar que las arañas rojas aparezcan en la planta se debe rociar con un insecticida con base de malatión.
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