La podredumbre marrón o parda (Monilinia spp.) son un grupo de enfermedades fúngicas que afectan a las frutas de hueso y a algunas frutas de pepita cultivadas en todo el mundo.
Es un problema durante el desarrollo de las frutas aparentemente sanas, así como una de las principales causas de deterioro de la fruta después de la cosecha en melocotones, cerezas, ciruelas y albaricoques.
Los hongos de la podredumbre parda pueden encontrarse en los brotes jóvenes, en las ramitas infectadas, en las flores abiertas o sin abrir y en la fruta podrida.
Las enfermedades de la podredumbre marrón se documentaron por primera vez en 1796 y pasaron por varios cambios taxonómicos en los últimos siglos, hasta que se clasificaron bajo el nuevo género Monilinia en 1928. Monilinia contiene unas 25 especies de hongos, con tres especies que causan infecciones de la fruta por podredumbre parda: Monilinia laxa, Monilinia fructigena y Monilinia fructicola.
Como ocurre con la mayoría de las enfermedades fúngicas, ésta es más frecuente en condiciones de calor y humedad, y es la principal razón por la que los agricultores utilizan fungicidas en las frutas de hueso.
Aunque estas tres especies de hongos tienen distribuciones geográficas y especies de frutas hospedadoras diferentes, están estrechamente relacionadas con ciclos de vida y opciones de tratamiento similares. Los métodos de control de este post se aplican a todas estas especies de Monilinia.
La podredumbre parda no es una enfermedad letal para la mayoría de las plantas, pero ha causado importantes pérdidas económicas en todo el mundo por las infecciones de los frutos. Por suerte, ha sido estudiada por los investigadores agrícolas durante cientos de años, que han desarrollado las mejores prácticas para gestionar el impacto negativo de la enfermedad.
¿Qué es la podredumbre marrón?
La podredumbre marrón es un grupo de enfermedades fúngicas que afectan a las frutas de hueso y a algunas frutas de pepita cultivadas en todo el mundo. Es un problema durante el desarrollo de las frutas sanas, así como una de las principales causas de deterioro de la fruta después de la cosecha en melocotones, cerezas, ciruelas y albaricoques.
Los hongos de la podredumbre parda pueden encontrarse en los brotes jóvenes, en las ramitas infectadas, en las flores abiertas o sin abrir y en la fruta podrida.
Como ocurre con la mayoría de las enfermedades fúngicas, ésta es más frecuente en condiciones de calor y humedad, y es la principal razón por la que los agricultores utilizan fungicidas en las frutas de hueso.
Aunque estas tres especies de hongos tienen distribuciones geográficas y especies de frutas hospedadoras diferentes, están estrechamente relacionadas con ciclos de vida y opciones de tratamiento similares. Los métodos de control de este post se aplican a todas estas especies de Monilinia.
Síntomas de la podredumbre parda
Los síntomas de los hongos de la podredumbre parda son muy similares en todas las plantas afectadas. Las flores son susceptibles de sufrir el tizón de la flor a principios de la primavera. Las flores enfermas pueden marchitarse, volverse marrones o aparecer cubiertas de esporas de conidios.
Algunas infecciones de flores pueden provocar la caída de las mismas, mientras que otras que sufren el tizón de la flor pueden permanecer adheridas al tallo.
Las flores infectadas suelen propagar la enfermedad al tallo. A medida que avanza el desarrollo de la enfermedad, pueden desarrollarse chancros en la corteza que producen esporas asexuales y causan una ola secundaria de infecciones más adelante en la temporada de crecimiento.
Estos cancros pueden interrumpir el flujo de agua y nutrientes y pueden provocar la muerte de las ramas o el tizón de las ramas.
Los frutos jóvenes son más resistentes a los hongos de la podredumbre parda que los frutos maduros, que pueden infectarse a través de cualquier herida o abertura causada por el clima, la manipulación o los insectos.
Las infecciones de la fruta aparecen primero como manchas marrones blandas que pueden expandirse rápidamente hasta cubrir toda la fruta en anillos bronceados y concéntricos. Los frutos pueden parecer cubiertos de una pelusa gris, que es un signo visible de las esporas del hongo.
A veces, los frutos pueden no mostrar ningún síntoma hasta después de la cosecha. Los frutos infectados acaban por secarse y arrugarse hasta adquirir un aspecto momificado.
¿A qué plantas afecta la podredumbre parda?
La podredumbre parda de la fruta de hueso es una enfermedad común en frutas como los melocotones, albaricoques, cerezas y ciruelas. De estas tres especies, Monilinia fructicola se considera la más perjudicial para la producción de fruta de hueso.
La podredumbre parda causada por Monilinia fructigena es más común en las frutas de pepita, como las manzanas y las peras, que en las frutas de hueso.
Control de la podredumbre marrón
La podredumbre marrón no es una enfermedad letal y puede controlarse podando y eliminando los cancros de los árboles frutales durante su periodo de inactividad en invierno.
- Intenta desinfectar el equipo entre cortes para no transmitir la enfermedad, sumergiendo las herramientas en una solución que contenga un 10% de lejía o un 70% de alcohol durante al menos 30 segundos.
- Los insectos se sienten atraídos por la fruta que está madurando y transmiten la enfermedad creando heridas. Puedes limitar la infección de la fruta controlando los insectos de tu huerto mediante una combinación de técnicas de gestión integrada de plagas.
- Los frutos pueden presentar podredumbre parda después de la cosecha. Durante el periodo de cosecha, es importante manipular la fruta madura susceptible con cuidado, ya que estas frutas están en estrecho contacto entre sí en los contenedores de almacenamiento, lo que puede hacer que la enfermedad se propague rápidamente.
- Refrigera los frutos inmediatamente después de la cosecha, puesto que el almacenamiento en frío interrumpirá el ciclo de la enfermedad.
- Si utilizas fungicidas, lee atentamente las instrucciones y aplica los productos químicos siguiendo las indicaciones del envase. Los fungicidas suelen utilizarse en dos periodos diferentes, al principio de la temporada, para mitigar el tizón de la flor, y de nuevo más tarde durante la temporada para controlar las infecciones de los frutos. El fungicida de cobre es el más utilizado contra la mayoría de las Monilinia spp.
Prevención de la podredumbre parda
El saneamiento es clave para prevenir la propagación de la podredumbre parda.
- Intenta cuidar tus árboles frutales retirando cualquier fruta caída o infectada. Los frutales de hueso descuidados con frutos momificados pueden albergar el hongo de la podredumbre parda durante el invierno. No compongas material vegetal infectado.
- Elimina las ciruelas silvestres y otros huéspedes potenciales alrededor de tu huerto para disminuir el depósito de hongos latentes cerca de tus plantas.
- Asegúrate de podar los árboles frutales para mejorar la circulación del aire en caso de tiempo húmedo y condiciones de humedad.
- Los frutos raleados también tienen más posibilidades de sobrevivir, ya que hay menos probabilidades de que los frutos restantes se toquen en una rama o se rocen con otras.
- Algunos cultivos de melocotón son más resistentes a la podredumbre parda que otras variedades de fruta de hueso. Si sabes que la podredumbre de la fruta es un problema crónico en tu propiedad y que es probable que la fruta esté infectada, considera la posibilidad de plantar variedades resistentes como Elberta, Glohaven y Babygold nº 5 como otro método preventivo.
Soy Carolina. Cursé estudios de el Grado en Ingeniería Agrícola por la Universidad de La Rioja.
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