La gerbera es una de las flores más hermosas debido a su forma simétrica y elegante. De hecho, se le relaciona con la pureza, inocencia y alegría, y por eso se le reconoce como un símbolo clásico de belleza.
Así que no es raro que sea la quinta flor de corte más popular en todo el mundo. Si te interesa incorporar a esta bella flor en tu jardín, es importante que conozcas algunos detalles sobre su cultivo.
Por ello, hemos preparado esta breve guía con los principales cuidados de la gerbera. Esperamos que te sea de utilidad.
¿Qué necesidades de tierra tiene la gerbera?
Para la gerbera es indispensable un sustrato suelto, profundo, aireado, con buen drenaje.
Provisto de materia orgánica, como la turba y humus, los cuales permiten el desarrollo del sistema radicular de la planta.
Un buen sustrato puede estar compuesto en un 40% a 60% de tierra de hoja suelta y composteada como la fibra de coco o Peat Moss.
De 20% a 30% con ingredientes con alta retención de humedad como el polvillo de coco, Peat Moss o vermiculita; y de 20% a 30% por arena de río mediana o perlita.
Con respecto a los valores de pH, estos deben permanecer en un nivel medianamente ácido, entre 5.5 y 6.5, pues a niveles mayores se podría producir clorosis férrica. Por otro lado, a valores inferiores se produce el marchitamiento de la planta.
¿Cómo hacer para que la gerbera crezca fuerte y vigorosa?
Las gerberas necesitan atención constante, pero son muy agradecidas con los cuidados que se les brindan. Por ello, a continuación te presentamos algunos de los principales aspectos que debes considerar a la hora de cultivar esta hermosa planta.
Temperatura
La temperatura es un aspecto importante dentro de los cuidados de la gerbera ya que influye en la velocidad de la floración, la producción de hojas, así como en su crecimiento. Como tal, la gerbera tiene un amplio rango de temperatura el cual va desde los 10°C hasta los 30°C.
No obstante, el nivel óptimo oscila entre los 15°C y 26°C. Es importante cuidarla de los cambios bruscos y exposiciones extremas ya que retrasan su desarrollo y floración.
Iluminación
Aunque no influye en ella el fotoperiodo, la luz es importante ya que le permite desarrollar brotes laterales, mismos que darán lugar a nuevas flores, incrementando así la producción de la planta.
Debido a lo anterior, se recomienda ubicarla en un lugar con alta intensidad luminosa, de 43,000 a 53,000 lux. Es preferible exponerla bajo la luz directa del sol, pero en el caso de las plantas jóvenes y recién plantadas, estas deben colocarse en sitios con sombra ligera.
Fertilización
La gerbera es una planta que necesita la aplicación de fertilizante. Como tal, se recomienda el abono nitrogenado, bien equilibrado, especialmente en la fase de crecimiento y en las épocas de más calor en la región.
Un ejemplo de este puede ser un abono complejo del tipo 20-10-10 en plantas jóvenes, a razón de 2 kilos por metro cuadrado. Expertos también recomiendan un abonado con una proporción de 2:0.8:1.5 y la adición de fósforo en el abonado de fondo o en otoño.
¿Qué humedad necesita la gerbera?
El riego es otro de los cuidados esenciales de la gerbera. Aunque no requiere de mucha agua, es necesario conservar el suelo húmedo para evitar el estrés hídrico, así como el retraso en el crecimiento de las plantas.
En el caso del riego, deberá aplicarse cada 4 o 5 días, especialmente durante los periodos de calor. Mientras que en el invierno deben disminuirse, aplicando un riego cada 2 semanas, esperando a que el suelo esté medio seco.
Con respecto a la humedad relativa, debe encontrarse entre el 75% y el 90%. Como tal, la humedad óptima siempre estará relacionada con la temperatura y la iluminación.
Pues a mayor luz y temperatura se necesitará de un mayor porcentaje de humedad.
¿Es necesario podar la gerbera?
La poda no forma parte de los cuidados esenciales de la gerbera. Sin embargo, se emplean técnicas relacionadas para favorecer el desarrollo de la planta, así como su floración.
La primera implica eliminar los primeros botones florales; esto permite que la planta produzca más flores. La segunda, el deshojado, se trata de retirar las hojas moradas, las secas, así como las que están en proceso de secarse.
¿Cada cuánto debemos podar la gerbera?
La eliminación de botones se da cuando estos recién brotan en la planta, generalmente durante la primavera.
Sin embargo, puede practicarse a lo largo de todo el año, de acuerdo a la necesidad. Con respecto al deshojado, debe realizarse cuando aparezcan hojas en mal estado o se marchiten.
En el caso del deshojado, deberá realizarse durante el invierno. No obstante, en un cultivo normal, suele realizarse cada dos semanas.
¿Cómo evitar que aparezcan plagas y enfermedades en la gerbera?
Las gerberas son susceptibles a enfermedades no parasitarias, así como las causadas por muchos hongos del suelo, como el Fusarium y Verticillium. De igual manera, pueden verse afectadas por el Pythium, Phytophtora y Rhizoctonia.
Para prevenir su aparición, se recomienda realizar una buena desinfección en el suelo, evitar plantarlas a un nivel muy profundo, así como evitar la humedad excesiva. Asimismo, se recomienda la aplicación preventiva de fungicidas.
Con respecto a las plagas, la gerbera es atacada por la mosca blanca, el gusano minador, el pulgón, la cochinilla harinosa, trips y ácaros. Para evitar su aparición se recomienda revisar la planta constantemente y aplicar insecticidas o tratamientos con prontitud.
Conclusiones
Esperamos que esta breve guía te permita incorporar a estas hermosas plantas en tu jardín y que te brinde las bases para cultivarlas como es debido. Te invitamos a que sigas leyendo nuestro blog para conocer más sobre esta y otras plantas.
Referencias bibliográficas
- https://www.mapa.gob.es/ministerio/pags/biblioteca/hojas/hd_1976_01.pdf
- https://inta.gob.ar/sites/default/files/script-tmp-cultivo_de_gerberas.pdf
- https://www.plantulasdetetela.com.mx/download/Gerbera.pdf
- https://es.wikipedia.org/wiki/Gerbera
¡Hola!
Soy Arantxa Bellido y hace años que colaboro con Sembrar100. Soy graduada en Ingeniería Agroambiental (2014) por la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agroambientales. También he cursado el Programa Oficial de Posgrado en Agrobiología Ambiental por la Universidad de Navarra.
