En este artículo te mostramos las tipos y variedades de cebollas más cultivadas a lo largo de mundo y quizás te puedas hacer una idea de la variedad que más te conviene para tu huerto.
Con nombre científico Allium cepa, la cebolla es una planta bulbosa mundialmente conocida por ser uno de los alimentos más usados en la cocina.
Allí se utiliza de muchas maneras porque su sabor característico es único para hacer cualquier plato.
Pertenece a la extensa familia de las Liláceas, al igual que sucede con los ajos, el cebollín, las cebolletas y los puerros.
Ricas en fibras y vitaminas, las cebollas son hortalizas con poderosas cualidades antioxidantes que nos ha regalado la naturaleza.
Tipos o variedades de cebollas
Existe una gran diversidad de tipos o variedades de cebollas en el mercado mundial, pero es común clasificarlas de acuerdo al color y el sabor de la especie.
Así las cosas, las cebollas más comunes son las siguientes:
Cebolla blanca
Su color blanco como las nubes es muy característico, tanto por fuera como por dentro. Ideal resulta su incorporación en ensaladas, como guarnición o en guacamoles y aderezos.
Se dice que es la cebolla de primavera. Tradicionalmente, su cosecha se realizaba antes de su maduración total, aunque en la actualidad se puede contar con ella durante toda la temporada.
Sin embargo, su capacidad de conservación es limitada, se pudre antes que otras variedades. Es crujiente, así que se recomienda su consumo crudo y como su sabor es más suave, es añadida en ensaladas o pizzas.
Las variedades blancas de cebollas más conocidas son: Blanca Grande Tardía, Cirrus, Sierra Blanca, La Joya, Stratus y Sterling.
Cebolla amarilla
La variedad amarilla o Vidalia, es de gran uso mundial en las cocinas de millones de hogares. Su apariencia externa tiene una capa de piel espesa de color marrón, la cual al desprenderse activa el hedor a azufre.
Tiene menor contenido de agua que otras especies y dependiendo del momento de recolección, será más o menos picante. No obstante, los expertos señalan que en los meses cálidos suele ser más suave su sabor.
Entre las variedades amarillas resaltan la Babosa, y la Amarilla de Cabeza Grande Achatada.
Cebolla Vidalia
La variedad Vidalia es originaria del estado de Georgia, en Estados Unidos de América. Allí suele ser cultivada en suelos pobres en azufre, lo cual le concede un sabor más suave.
Así se le considera entonces como una de las variantes más dulces. Es entre los meses de abril a septiembre cuando se cultiva mayormente. Suele confundirse con la típica cebolla amarilla, pero es un poco más chata su apariencia.
Cebolla perla
Se trata de una variante blanca con menor tamaño y sabor suave, menos picante. Es la favorita en los encurtidos.
Cebolla morada o colorada
Son las predilectas en muchos platos, desde sándwiches hasta ensaladas y preparaciones gourmet. Su color púrpura y sabor picante añaden valor, más aún si se combina con rúculas, lechugas, tomates, col rizada y otros ingredientes naturales.
Pero son perfectas para incluirlas en ensaladas crudas, por su brillo esplendoroso, toque picante y su textura crujiente. Tiene gran poder antioxidante y exhibe excelente capacidad de conservación y además tiene menos contenido de agua.
Se cultiva tanto en primavera como en verano y su sabor picante ligero y color llamativo la ubican como complemento de muchos platos, pero sus adoradores la prefieren cruda en ensaladas. En Italia, así como en otras latitudes, son de uso común en pizzas, ceviches, tacos y “perros” calientes.
Variedades famosas de especie morada son: Cebolla Roja de Tropea, Red Granex, Cebolla Roja de Turda y Carmen.
Calçots
Es una cebolla tierna con un bulbo poco destacado o pronunciado que se ha convertido en todo un emblema de la maravillosa comida catalana y en las Islas Baleares. Allí se le considera un verdadero manjar de dioses.
Suele consumirse a partir del mes de noviembre, apenas se asoma el frío.
Cabe destacar que las variedades de cebollas blandas suelen ser las más dulzonas y menos picantes, mientras que las más duras son las intensas en sabor. Los expertos señalan que el sabor muchas veces está asociado con la procedencia geográfica de la especie de cebolla.
Esto se debe a que influyen las condiciones climáticas, así como el tiempo de la cosecha, lo cual incide en el grado de acritud de la cebolla. Otros factores determinantes son la suavidad o no del clima y los contenidos minerales del suelo donde se desarrolla la planta.
Y es que en algunos lugares donde por ejemplo se producen fuertes precipitaciones anuales, el azufre del suelo se aliviana y se obtienen “cebollas dulces”.
De la misma manera, se habla de cebollas de “bulbo temprano” o dulces, y cebollas de “bulbo tardío” o picantes, lo cual indica en términos sencillos cuál ha sido la velocidad de formación de los bulbos.
Las variantes más usadas en España
En la dieta mediterránea, las cebollas son muy utilizadas, bien sea como ingrediente de salsas usadas como guarnición, ensaladas, sofritos y más.
Los amantes de ese bulbo de gran poder nutricional, diurético y antioxidante, la han incorporado a la emblemática tortilla española.
Ciertamente, a la hora de hablar de cebollas las opciones parecen infinitas. También existen otras variedades de amplio uso culinario
Cebolletas
Tienen un sabor dulce, suave y se presentan en forma de ramas largas y finas. Son una especie distinta de la familia Allium, la Allium fistulosum. Pero mejor se le conoce bajo el nombre popular de cebolla china o cebolla verde.
Son de color blanco brillante con tallos muy verdes, por lo que se venden en racimos Se pueden consumir crudas, cocinadas en muchísimos platos, para realzar el sabor. En frituras la cebolleta es sencillamente perfecta, así como en ensaladas.
Parecida al cebollino, es un ingrediente infaltable en la cocina asiática.
Cebollinos
El tallo es muy apreciado en esta variante, porque se considera una hierba aromática. Igualmente puede consumirse crudo o fresco, teniendo un sabor más suave que el de la cebolla, así que no hay problema en añadirlo a ensaladas y carnes o pescados.
Tanto en la cocina española como en la francesa los cebollinos siempre están a la mano. Otra modalidad de consumo popular es mezclarlo con mantequilla para forma una salsa muy suculenta para acompañar carnes a la parrilla.
Ptujski Lük
Procedente de la región de Ptujsko polje de Eslovenia, es una cebolla achatada con una piel marrón rojiza y pulpa blanca que se ha puesto de moda en las cocinas europeas.
Tiene un fuerte olor, pero su sabor es suave y se cocina rápidamente.
Cebolla chalota o cebolla francesa
Conocida como la cebolla francesa, es una especie distinta de la cebolla tradicional, porque es pequeña y alargada, con tonos violáceos en su pulpa.
Es de un sabor dulzón, suave y muy aromático. Ofrece un sabor más complejo a las comidas, por lo que forma parte integrante de la alta gastronomía francesa, así como en los ya clásicos tallarines tailandeses, en platos que lleven mariscos, verduras y hasta en los huevos quedan divinas.
En la cocina española pegan súper bien con asados de carne, salsas y vinagretas. Los tipos de cebollas blancas y amarillas son comunes también en la cocina española, porque son versátiles y se comen tanto crudas como cocidas o fritas.
Pero igualmente ha crecido en popularidad la cebolla morada, el acompañante ideal en ensaladas que lleven tomates, aceite de oliva y sal, en tiempos de verano. En Cataluña son comunes los sembradíos de calcots, un tipo de cebolla que forma parte de muchos platos de la región, gracias a su sabor tierno y dulce.
De hecho, existe en Tarragona una Fiesta de la Calcotada, celebrada el último domingo del mes de enero de cada año. En esa jornada festiva los asistentes suelen degustar esta cebolla a la brasa, junto a un aderezo hecho con la llamada salsa romesco.
Características de las cebollas
Los bulbos varían en tamaño, forma y color, al igual que se registran cambios en el sabor dependiendo de la variedad y la época de su cultivo. Esto explica el hecho de que las haya más jugosas, más o menos picantes o también dulzonas.
Se pueden servir crudas o cocidas y hasta encurtidas, por lo que gracias a su versatilidad pueden formar parte de la dieta diaria con un uso dilecto en aderezos y ensaladas. Su origen se remonta a miles de años atrás, cuando en el Egipto antiguo se usaban como alimento.
En el Imperio romano igualmente tuvo gran fama por sus múltiples propiedades y beneficios para la salud. Tan es así que Hipócrates la recetaba en sus consultas médicas como un poderoso diurético, para curar heridas y tratar neumonías.
Se cree, no obstante, que su origen se halla localizado en Asia. Los chinos desde tiempos inmemoriales la han usado como medicina natural para curar enfermedades respiratorias.
En la Edad Media alcanzó de la misma manera una popularidad enorme. En la actualidad, se estima una cosecha de 105 millones de libras de cebollas a nivel global.
China está a la cabeza de la producción mundial, seguida de India, Estados Unidos, Turquía y Pakistán. Estos son datos que se pueden consultar en los reportes de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, conocida como FAO.
Es un bulbo muy cumplidor, cuya planta tiene hojas verdes alargadas y tubulares muy características. Dicho bulbo es la parte comestible y se desarrolla en la base de la planta, con un diámetro variable.
Mady Rojas
Mi nombre es Mady Rojas Meneses y soy redactora freelance desde el 2018. Encontré el camino para la felicidad a nivel profesional: llenar páginas web de contenidos útiles, interesantes y fáciles de leer como el que ves arriba. Hago lo que amo y amo lo que hago.
